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Alejandro Carrión en el Internet
New Directions Publishing, Inc.
A Checklist: 1941
"Danza macabra en la muerte de Poe"
PERSONAJE DE LA CULTURA ECUATORIANA
REPERTORIO DE MUSICA LOJANA
Cultura Viva de Ecuador ¡Bienvenidos!
"Los años de la fiebre" por Raúl Arias Alejandro Carrión acusaba que la toma de la CCE era una alianza de los comunistas, representada por Oswaldo Guayasamín, y de la curia metropolitana, representada por Rodríguez Castelo, a través de diario El Tiempo
"Espejo y las pasiones de Carrión" Por: Raúl Arias y (Vol 1 de la misma ira confusa). El poeta y activista cultural Raúl Arias realiza una investigación acerca del estudio que efectuara Alejandro Carrión acerca de la obra de Eugenio Espejo; varias irregularidades se encuentran en la ‘particular’ visión de ‘Juan sin Cielo’. Esta es la segunda entrega del tema.
Wikipedia - en ingless...
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BIBLIOGRAFÍA DE CERVANTES (BEIC)
| Ecuador DEBATE Nº 46 |
MINISTERIO DE RELACIONES EXTERIORES DEL ECUADOR
Alejandro Carrión y Alfredo Palacio, dos duelos a muerte imposibles...
| Otros tiempos. Lonchería Italiana, Quito.... Juan sin cielo, perdón, Alejandro Carrión (el periodista que moduló el debate Borja-Febres Cordero) entra al sitio acompañado de Adoum, Pedro Jorge Vera y Diógenes Paredes. Carrión se molesta mucho al ver que un hombre come con el sombrero puesto. Se acerca y tira del sombrero hasta que cubre los ojos del malcriado, y se retira. El agredido, “herido en su dignidad”, se acerca a decirle que había ofendido “el orgullo de las Fuerzas Armadas” y que exigía “lavar la afrenta en el campo del honor”. ¿Cómo saber que era militar si no tenía uniforme?, le preguntan. ¿Cómo aceptar un duelo si estaba en desuso y solo se practicaba en ciertos países europeos?, le argumentan. El militar no entraba en razones y “tras deliberaciones largas, le pidió a Carrión -dando pruebas de hidalguía pues era el ofendido- que escogiera las armas. Alejandro, ya cansados todos de tanta majadería, le dijo: ‘muy bien: cañón’. La carcajada coral fue muestra de que, excepto el retador, imaginábamos a los rivales, apuntándose recíprocamente, uno en la colina del Panecillo, otro en la del Itchimbía, con todo el sector suroriental de Quito como campo del honor...”. |
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Kipus: revista andina de letras
No. 16, II semestre 2003